Viendo el gráfico de largo plazo del par, parece evidente la pérdida de impulso que ha sufrido el USD respecto a la moneda japonesa. Con un horizonte en el que se puede divisar el fin de las medidas de estímulo es normal que el vigor que tenía la moneda USA haya perdido intensidad. Eso queda plasmado en el gráfico en forma de una figura de indecisión y resistencia a posibles avances.
GRÁFICO SEMANAL
Si vivimos un mes de Junio con una severa corrección en el par que nos llevó de nuevo a niveles inferiores a la psicológica cota de los 100 yenes, el par se detuvo casi exactamente en el nivel 0,618% Fibo de la caída inmediatamente anterior. Desde aquí la reacción permitió al par volver a perforar la Linea de tendencia del movimiento pero como hecho claramente destacable no se consiguieron alcanzar nuevos máximos, entrando desde ese momento en una fase de adormecimiento.
Todos los ojos están puestos en el futuro inmediato de la FED, pasado por la finalización del QE y el relevo de Bernanke, y esto con toda seguridad marcará el futuro inmediato. Tradicionalmente hemos comentado que este es un par sometido siempre a alta presión, dado el alto intervencionismo de los respectivos bancos centrales, tanto FED como BOJ. Como punto de referencia de esta zona podemos observar los mínimos marcados por el nivel Fibo semanal y el máximo histórico alcanzado en niveles de 103 yenes.
GRÁFICO HORARIO.
Gráfico horario en el USDJPY en el que vemos una tendencia alcista vigente en esta temporalidad, que ya ha testeado en una ocasión la zona de 0,50% Fibo de la tendencia histórica bajista en gráfico semanal, superpuesta prácticamente a la cota de los 100 yenes. Esto ha forzado al par a buscar apoyo en la zona de mínimos generada durante el pasado discurso de Bernanke del mes Julio, en donde se habló de la retirada del programa de estímulos. Este nivel ha servido de referencia desde entonces y el precio ha ido pivotando alrededor.
Mientras no veamos una amenaza clara sobre esta línea de tendencia la progresión parece que seguirá vigente. Cerca aun está la LTB de 1998 en gráfico semanal que marca una división clara en el sentimiento inversor sobre el par y que podría provocar caídas de cierta importancia buscando mínimos en zonas de 0,94, tal y como sucedió en Junio.
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