Renta Variable española. Expectativas 2.014


Es habitual en estas fechas ver resúmenes de lo acontecido en los mercados financieros el año anterior, así como artículos de perspectivas sobre este año recién iniciado que intentan mirar dentro de la famosa bola de cristal. Como todos sabemos, el futuro es incierto y nadie tiene la seguridad de lo que va a suceder, por eso en los mercados financieros y en otros aspectos de la vida lo que hacemos es fijarnos en  lo sucedido para intentar ver lo que es más probable que suceda en el futuro. En el caso que nos ocupa, hacemos este ejercicio de introspección mirando hacia atrás al finalizado 2.013 para hacernos con la situación y sobretodo con el sentimiento de los mercados acerca de la Renta Variable española. Para ello,  nada mejor que los datos de los mismos mercados y otros de índole económica recopilados por BME en su informe de mercado 2.013. En este se reflejan aspectos que podemos interesar interesantes en la economía española y en los mercados financieros.


PERCEPCIÓN DEL RIESGO PAIS.

IMPORTANTE DESCENSO De los más de 600pb de 07/2012 hemos pasado a los actuales 180 aprox

Prima de Riesgo.

Sin duda haciendo un análisis detallado, la primera parada que realizamos es ver la prima de riesgo española. Para los no iniciados recordaremos que la prima no es más que la diferencia entre los tipos de interés de los bonos alemanes y españoles. Es decir que cuánto hay que pagarle a un inversor de más, para que éste opte por comprar el bono español entendiéndose que esta diferencia es el coste de la diferencia de riesgo que asume. La Prima de Riesgo era un concepto desconocido hasta hace poco, pero ahora ya forma parte de nuestra vida cotidiana y por tanto es algo que muchos tendrán presente.

Es evidente que el escenario que se presenta es mucho mejor que el pasado inmediato gracias a una importante disminución de la prima y eso ha tenido una influencia directa en los mercados. Si cogemos el máximo exponente (IBEX35) podemos ver como existe una alta correlación inversa.

En este caso, el escenario inmediato está claro que es que incluye una prima de riesgo en franco descenso con el resto de ratios de la economía al alza.

LA CRISIS DE DEUDA SOBERANA
LA INCERTIDUMBRE ALREDEDOR DEL EURO Durante unos meses la tensión alcanzó máximos históricos al tomar cuerpo la teoría de la rotura del EURO
EL RESCATE BANCARIO Finalmente se produjo el rescate sobre el sector bancario inyectando 40.000 millones

Gestores de compras.

En el aspecto industrial y corporativo es evidente la mejora del sentimiento y un reflejo claro lo podemos ver en los indicadores PMI  (Gestores de compras) sobre la economía española. Podemos apreciar una mejora clara de los indicadores desde mínimos de Octubre de 2.012 y que el IBEX ya empezó a reaccionar con antelación haciendo buena la sentencia de que los mercados financieros se adelantan a la economía real. La progresión de los indicadores de compra y el índice con más capitalización del mercado de Renta Variable en España es bastante claro, y por tanto parece obvio que es importante hacer un seguimiento adecuado de estos indicadores para los inversores en este mercado.

Pero, aun así... es éste el indicador que más ganancias ha proporcionado al mercado? en la mayoría de ocasiones podamos pensar que es así, mirando los datos esto no es del todo cierto. Este 2.013 ha tenido un factor diferencial importante y muy significativo y es que los índices de empresas medianas y pequeñas han tenido aumentos superiores al del índice por excelencia, el IBEX-35. El gráfico adjunto es suficientemente explicativo de este hecho y deja patente que los inversores ya han puesto sus ojos más allá de los Blue Chips, una demostración más de la confianza en el mercado español a  nivel global. Los índices de Medium y Small caps han tenido un comportamiento postivo por encima de los referentes al IBEX35.

 Las empresas ante la crisis.

Delante de esta crisis que ha acabado con gran parte del tejido económico del país, la única solución ha sido buscar soluciones alternativas. Las empresas han tenido que lidiar con múltiples problemas derivados de la situación y han ido adaptándose. Este año ha sido la culminación de parte de estos procesos, destacando principalmente:

1. El proceso de internacionalización, absolutamente necesario para diversificar sus fuentes de ingresos y disminuir el riesgo de dependencia en exclusiva del mercado doméstico. En este 2.013, el 62% de los ingresos de las compañías cotizadas han sido generados en mercados exteriores.

2. Reducción de las cargas financieras. Dentro de un marco general de optimización de los balances, este año ha sido importante respecto a la reducción de las deudas de las compañías con especial incidencia en las del sector no financiero

 La consecuencia directa de esto es una optimización de márgenes  competitividad. Debido a la coyuntura del propio mercado de crédito y a sus situación interna la mayoría de compañías han optado por reducir sus obligaciones financieras en la medida de los posible y para ello se han desecho en ocasiones de importantes paquetes de activos y con esos recursos amortizar deuda. Esto ya ha empezado a notarse en el mercado. Los mercados han cerrado un año que puede definirse como de recuperación, sobretodo en su segunda parte y que abre las puertas a cotas y niveles superiores en este 2.014 si la economía sigue la progresión actual. No parece temerario indicar que lo peor ha quedado atrás y que ahora deberíamos ir mejorando progresivamente la situación. Otra cosa es el ritmo al cual recuperemos niveles pretéritos a la crisis financiera.

AUMENTO DE LA COMPETITIVIDAD
INTERNACIONALIZACIÓN Las empresas han optado por disminuir el riesgo de mercado aumentando las exportaciones
DEUDA Se han seguido reduciendo los niveles de endeudamiento en empresas de sectores no financieros

 ACTIVIDAD EN LOS  MERCADOS.

Los mercados de acciones rompen la tendencia de años anteriores.

Visto desde la perspectiva de la actividad en los mercados financieros, las señales son positivas y vemos como hay un aumento de la actividad destacable. Los comentarios hacia el mercado español por parte de inversores extranjeros han cambiado su inclinación y parece que ven en él una gran oportunidad. No en vano, personajes importantes como Emilio Botín y otros ya advertían de la incesante entrada de fondos en activos de todo tipo de los mercados españoles. Esto nos trae un cambio de inflexión en la tendencia precedente. A diferencia de otros mercados europeos, los españoles aumentan en cifras, lo que podría sugerir un flujo de fondos de entrada a las busca de interesantes oportunidades. No hay que olvidar que la crisis ha castigado de forma excesiva el precio de muchos activos simplemente por el riesgo país, dejándolos simplemente muy por debajo de su valor objetivo.

 Los fondos recuperan saldos positivos.

Otro de los instrumentos más utilizados por los inversores ha experimentado un cambio de tendencia. En este 2.013 se consolida la entrada de nuevo capital en las SGIIC de Renta variable española, en máximos de 6 años, lo que nos deja en niveles anteriores a la crisis precipitada por la caída de L&B.

También podemos ver el mismo efecto, aunque más pronunciado en los ETF's referenciados a bolsa española, cuyo patrimonio gestionado ha aumentado de forma espectacular en algún caso, así que parece claro que el capital foráneo ya está entrando de forma decidida, lo ha hecho en este 2.013 y es probable que siga al mismo ritmo o lo aumente en este 2.014.

La hora de otros mercados minoritarios.

Dicen que de todas las crisis puede sacarse algo bueno, y sin duda esta no tiene porqué ser distinta a las demás. Debemos tener en cuenta lo que ha supuesto la prácticamente extinción del mercado de crédito para muchas compañías, o bien de forma efectiva porque el sector financiero no prestaba dinero, o tácita, por los elevados tipos a pagar en algún momento. Esta situación ha forzado a algunas compañías en expansión a buscar nuevas fuentes de financiación, y algunas han acudido a los mercados iniciando una práctica que veremos si se prolonga después de la crisis.  Los datos en ciertos mercados son elocuentes y casi el más destacable es un prácticamente desconocido MAB, que si alguna cosa hay que achacarle es su bajo nivel de liquidez. 

En este periodo analizado se han producido diversas operaciones financieras, tanto OPV como ampliaciones de capital que se han cerrado con bastante éxito, todo hay que decirlo. Y a diferencia de otros mercados, estas operaciones a día de hoy están resultando bastante positivas también para los inversores.

CONCLUSIONES

Sin duda podemos decir que este 2.013 es una año positivo en todos los aspectos, y la incesante llegada de flujos al mercado puede hacer de este año 2.014 un año positivo de nuevo, aunque quizás no tanto como el anterior. El hecho demostrado es que este flujo de capitales existe y hay un consenso en que hay que estar en mercados españoles, por lo que parece que el flujo puede prolongarse.

Todo esto puede redundar en un gran beneficio para los que están en los mercados. Este prolongado periodo de dificultades económicas debería enseñarnos muchas cosas y aún deja incógnitas por resolver. Una de las principales es el papel del sector bancario en la sociedad y economía post-crisis, y digo esto porque veremos como ha afectado a la percepción que la sociedad tiene de las entidades bancarias todo lo sucedido.

Los lazos de confianza y de fidelidad con las entidades preexistentes han desaparecido creo que para no volver, tanto a nivel de retail como a nivel de mercado mayorista,y la situación de estos últimos años del mercado de crédito a provocado que muchas empresas intenten buscar otras alternativas de financiación, y algunas de ellas lo han hecho mirando a los mercados.

Éstos han visto la oportunidad y han intentado abrir sus servicios a mid y small caps, sector en el que en este aspecto hay un gran potencial de crecimiento, por lo que en los próximos años podemos ver un importante crecimiento de estos mercados, que creo que no hay que perder de vista. Pero mientras, y con la vista puesta en 2.014 la evidencia es que los pronósticos no pueden ser otra cosa que positivos y con unas cifras en la línea de las del año anterior.